BEIJING, 20 nov (Xinhua) -- Varios líderes latinoamericanos y organizaciones multilaterales han denunciado las recientes maniobras diplomáticas y retóricas de Estados Unidos, advirtiendo que buscan preparar el terreno para una intervención militar en el Caribe.
En declaraciones públicas y pronunciamientos oficiales, dirigentes de la región calificaron las acciones de Washington como ilegítimas y peligrosas, y llamaron a la comunidad internacional a rechazar cualquier intento de normalizar una política de amenazas y coerción.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, condenó recientemente en la IV Cumbre Celac-UE las "maniobras retóricas" que buscan "justificar intervenciones ilegales en América Latina" y ratificó su oposición al despliegue militar de Estados Unidos cerca de aguas venezolanas y a los ataques a embarcaciones en el Caribe y el Pacífico.
"La amenaza de uso de la fuerza volvió a formar parte del cotidiano en América Latina y el Caribe. Viejas maniobras retóricas se reciclan para justificar intervenciones ilegales", afirmó Lula, y subrayó que la región "es de paz y queremos permanecer en paz".
Por su parte, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, denunció el martes en su cuenta de X lo que considera "mentiras" de Estados Unidos para justificar una agresión a Venezuela, calificando como "artificio deshonesto" la vinculación sin pruebas del presidente venezolano, Nicolás Maduro, con el narcotráfico y el terrorismo, y advirtió que se busca normalizar y legitimar una agresión contra una nación soberana.
Colombia también condenó las maniobras "inaceptables" de Washington en el Caribe y la canciller del país, Rosa Villavicencio, alertó el miércoles que cualquier acción de este tipo violaría el derecho internacional y la autodeterminación de los pueblos.
Organismos multilaterales, como el Movimiento de Países No Alineados, el Grupo de Países Amigos en Defensa de la Carta de la ONU y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), manifestaron su rechazo al despliegue militar estadounidense y exigieron el respeto a la soberanía e integridad territorial de los Estados latinoamericanos y caribeños, reafirmando que la región debe mantenerse como zona de paz.
De manera particular, el Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) exigió el miércoles la retirada de los activos militares estadounidenses de la zona y ratificó su compromiso con la soberanía e integridad territorial de las naciones.
El bloque, que agrupa a 121 países de la Organización de las Naciones Unidas y representa una de las mayores organizaciones políticas del Sur Global, precisó que las amenazas, la injerencia y la intimidación son contrarias a los principios de la ONU.
Mientras tanto, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) se sumó a la condena de la campaña de Estados Unidos contra Venezuela y denunció el uso de falsedades y pretextos para justificar una intervención.
A través de un comunicado, el bloque regional recordó que ninguna potencia debe imponer la fuerza sobre un país soberano, debido a que afectaría la estabilidad de América Latina y el Caribe.









