Por Cristóbal Chávez Bravo
SANTIAGO, 19 oct (Xinhua) -- La aguerrida selección de Marruecos se coronó campeón de la Copa del Mundo Sub-20 de la FIFA jugada en Chile, tras vencer este domingo a Argentina por 2-0 en el Estadio Nacional Julio Martínez Prádanos, gracias al iluminado delantero marroquí Yassir Zabiri que anotó dos goles y se inmortalizó en los anales deportivos del país africano.
Antes del inicio del partido, los fanáticos argentinos transmitían una cerrada confianza respaldada por los triunfos que sumaron en todos los compromisos disputados en este campeonato para llegar a la final.
Mientras que Marruecos ganó su pase a la final al derrotar en penales a Francia por 6-5, luego del empate por 1-1 en el tiempo reglamentario, y haber vencido a Brasil y España en la fase de grupos.
El vertiginoso juego de los "Leones del Atlas" se hizo notar los primeros minutos de la justa, con un estilo profundo que complicó a la defensa argentina y permitió un tiro libre al borde del área aunque la solicitud de revisión de jugada del entrenador del equipo africano Mohamed Ouahbi buscaba el penal.
El lanzamiento perfecto de Yassir Zabiri al minuto 12 abrió el marcador y también los festejos en el Estadio Nacional que, aunque eran minoría, recibieron el apoyo de casi todos los asistentes, gran parte del país local, producto de la rivalidad deportiva entre argentinos y chilenos.
La hinchada marroquí se apostó en la galería sur del Nacional y el ritmo de sus cánticos eran seguidos con vítores de los asistentes chilenos, quienes explotaron de júbilo tras un desborde de Othmane Maamma que conectó Zabiri al minuto 29 y se convirtió en su segundo gol en la noche; una jornada histórica para el nobel goleador.
Una tremulosa albiceleste intentó buscar soluciones desde el banco y su entrenador Diego Placente lo intentó con el ingreso en el minuto 33 de Mateo Silvetti, quien sumó tres goles en este torneo, pero no cambió el resultado final.
El primer tiempo finalizó con el ecléctico grito "viva, Chile" de los forofos marroquíes, un gesto para agradecerle al público local por el cántico "vamos Marruecos, esta noche tenemos que ganar", que vociferaron y que es comúnmente utilizado para apoyar a la selección chilena.
En el segundo tiempo la justa perdió ritmo, por el nerviosismo de los africanos y las erráticas jugadas de los sudamericanos en las que desperdiciaron varios goles.
En la postrimería del partido, la emoción no llegó con una jugada, sino con la salida del jugador marroquí Othmane Maamma, quien recibió la ovación de gran parte del estadio, pero el rechazo del jugador argentino Ian Subiabre quien lo empujó tras acusar que el africano demoró su partida de la cancha; recibió tarjeta amarilla por esta acción.
Luego de un fallido intento argentino sonó el pitido final y desató el desenfreno de casi la totalidad de los 43.253 espectadores que presenciaron la noche de este domingo el primer título en una Copa del Mundo, tanto juvenil como adulto, de Marruecos.
La copa la ingresó a la cancha el exdelantero Davor Šuker, quien ganó este mismo título en 1987 con la extinta Yugoslavia (hoy Croacia) que se jugó también en Chile y que, tal como ocurrió con Marruecos, este triunfo hizo nacer una conexión entre esta nacionalidad y los locales.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, le pasó la copa al capitán de los "Leones del Atlas" Houssam Essadak, quien la levantó junto a sus compañeros en tierras chilenas y se inmortalizaron en la historia del país africano.
En la jornada del sábado, también en el Estadio Nacional, Colombia venció por 1-0 a Francia, gracias a la anotación del delantero cafetalero Oscar Perea, e igualó su mejor ubicación en una Copa del Mundo Sub-20 tras el tercer lugar conseguido en Emiratos Árabes Unidos en 2003.
Es la segunda vez que Chile organiza un Mundial Sub-20 masculino, luego de la primera experiencia en 1987, cuando obtuvo el cuarto lugar de la justa mundialista.