LA PAZ, 18 ago (Xinhua) -- El candidato de la Alianza Libre y segundo en la primera vuelta de la elección presidencial en Bolivia, Jorge "Tuto" Quiroga, afirmó hoy lunes que la campaña rumbo al balotaje del 19 de octubre partirá de cero.
"Es una nueva elección y no se suman a los votos (que obtuvimos). Otra vez los contadores se ponen en cero para los dos binomios", declaró el candidato a la prensa boliviana.
El aspirante opositor y expresidente de Bolivia (2001-2002) obtuvo el 26,81 por ciento de los votos, más de cinco puntos por debajo de Rodrigo Paz, candidato del Partido Demócrata Cristiano (PDC), quien obtuvo 32,14 por ciento, con el 95,41 por ciento de las actas contabilizadas, según los datos del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
En este sentido, Quiroga consideró que la segunda vuelta de las elecciones abre un escenario totalmente distinto rumbo a la elección presidencial.
"Lo que viene es un debate sobre el futuro de Bolivia, con propuestas claras y sin guerra sucia. Vamos a hablar con la gente para explicarle nuestra propuesta y convencerla con ideas sólidas", insistió.
Asimismo, reconoció el trabajo de sus adversarios electorales, incluso de aquellos que obtuvieron porcentajes menores, y defendió que cada candidatura "aportó a la democracia".
Además, adelantó que su campaña para la segunda vuelta estará centrada en la unidad de los bolivianos, la salida de la crisis económica y la reconciliación nacional.
"En la segunda vuelta el tema interesante es cómo solucionamos la crisis que nos ha dejado (el oficialista MAS) para dar respuestas al pueblo porque de lo contrario esto podría ser 'un veranito'. Por lo tanto, tenemos que dar respuestas y en Alianza Libre tenemos la propuesta. Queremos sumar apoyos sin exclusiones y construir consensos amplios", afirmó.
En cuanto al escenario legislativo, en caso de un posible triunfo electoral, Quiroga afirmó que será clave en la gobernabilidad, al tiempo que recordó que el Movimiento Al Socialismo (MAS) gobernó durante 20 años con mayoría aplastante en el Congreso, lo que derivó en control institucional.
"Hoy la historia es diferente, vamos hacia un parlamento plural, y lo que corresponde es trabajar en acuerdos, no en imposiciones", enfatizó.
El candidato centró buena parte de su discurso en la crisis económica que atraviesa Bolivia, por lo que planteó un plan de inyección internacional de 12.000 millones de dólares para garantizar liquidez, frenar la inflación y asegurar el suministro de combustibles.
Quiroga aseguró que en los próximos días su agrupación terminará de organizar la agenda legislativa que acompañará su eventual gobierno. Insistió en que no piensa "perder un solo día" y que espera que incluso sus adversarios se sumen a un esfuerzo común.